Intimidad Después Del Climax

Los artículos de la categoría «Pareja» han sido escritos por una amiga sexóloga que trabaja con parejas.

Nota Personal: En el siguiente artículo mi amiga Viviane nos habla sobre la intimidad después del sexo. Aunque a los hombres no nos interese y pensemos que la «faena» esta en el momento que la penetramos, si quieres profundizar la conexión que tienes con tu pareja, la intimidad después del orgasmo es MUY IMPORTANTE. – Luigi

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Introducción

Se presta muy poca atención al final de acto sexual. Algunas personas se ignoran totalmente una vez que han llegado al clímax, mientras que otras se quedan dormidas casi inmediatamente. Muy pocos entienden que una buena experiencia tiene un comienzo, un medio y un final, y que si se priva al acto sexual del final, resulta incompleto y a menudo poco satisfactorio. Aprender a sentirse cerca de su amante después de haber hecho el amor puede aumentar enormemente la experiencia sexual. Así lo describía una mujer: «Para mí, una de las mejores partes del acto sexual son esos minutos de paz, después de llegar al clímax, cuando estamos tumbados juntos abrazados, mirándonos a los ojos, murmurando palabras de amor y cariño o sintiéndonos completos con nuestro amor»

Paso 1 : Entender La Necesidad De «Calmarse

De igual forma que necesitamos encontrar momentos especiales para ser amantes, necesitamos dedicar unos diez minutos a «calmarnos» después del gran momento. El orgasmo no siempre resuelve la sexualidad tan completamente para las mujeres como para los hombres: algunas mujeres pueden tener más orgasmos, otras pueden haber tenido sólo orgasmos menores como resultado de la ineficiente estimulación del coito. En otras palabras, una mujer puede necesitar un final más cerebral en su acto sexual, ya que puede que su cuerpo no esté tan relajado y libre de tensión sexual después del coito como el de su pareja.

Los clientes de psicoterapia aprenden que la mayoría de los sucesos y relaciones tienen un comienzo, un medio y un final. Puede parecer obvio, pero los terapeutas llaman la atención sobre esto porque el modo en que las personas se enfrentan a los finales es con frecuencia indicativo de cómo se enfrentan a las relaciones en general. De hecho, una de las tareas que comúnmente se requieren de un cliente de terapia es aprender a acabar bien. El mismo principio es aplicable a cualquier suceso en nuestras vidas, no importa su tamaño, y el sexo no es una excepción

TÉCNICAS DE MEDITACIÓN

Aprender la experiencia de una resolución amorosa y «espiritual» significa adoptar otra forma de final. El masajista estadounidense Ray Stubbs emplea técnicas de meditación para enseñar la importancia de reavivar el acto sexual. Su aspecto innovador entre los terapeutas occidentales es que aúna toque corporal y toque mental. «Calmar la mente y relajar el cuerpo pueden ser los caminos hacia una expresión sexual más completa», escribe. «Profundizando en nuestra consciencia, podemos sentir ondas de placer por todo el cuerpo. Tocamos no sólo con los labios, genitales y manos, tocamos con el corazón»

MÉTODOS DE MEDITACIÓN

Ray explora dos métodos de meditación sencillos para conseguirlo. Pero es el primero en recomendar que si, habiendolos probado, no se consigue nada, es aconsejable dejarlos antes que aburrirse con algo irrelevante.

Paso 2 : Respirar Juntos

En el primer paso de este programa, usted y su amante deberían aprender a tumbarse uno al lado del otro, abrazarse y respirar juntos al mismo tiempo. Cuando usted inspira, también lo hace su pareja. Cuando su pareja espira, usted también.

Esta respiración sincronizada puede parecer artificial cuando se practica por primera vez, y a algunas parejas les resulta difícil al empezar. Es perfectamente comprensible por dos razones. En primer lugar, el acto de inspirar y respirar al mismo tiempo teniendo a alguien tumbado al lado no es algo que hagamos naturalmente. Y, en segundo lugar, el ritmo normal de respiración de una persona puede variar del de otra, por lo que algunos tienen que ajustar los ritmos individuales de respiración.

UNIÓN Y FUSIÓN

Pero a medida que se acostumbra a la respiración, se hará natural y sin esfuerzo. Parece que hubiera una unión y fusión, y se hace difícil distinguir su respiración de la de su pareja. Cuando esto ocurre, es fácil perder la noción del tiempo. Hay un sentimiento de unidad.

Los únicos requisitos reales son estar tumbados de una forma en que se pueda respirar sin dificultad y en que su cuerpo esté los suficientemente cómodo para relajarse (una postura ideal para esto es la de las cucharas). Si respirar juntos es tan relajante que es imposible mantenerse despiertos después del coito, prueben el experimento antes de hacer el amor. Respirar al unísono calma la mente, y los matices de la sensualidad adquieren un significado mayor.

Paso 3 : Contemplarse

Contemplarse es una variación de una técnica de meditación básica, y en meditación a menudo se emplea como un método para volverse hacia el interior mentalmente. Haga esta rutina simple después del coito, contemplando deliberadamente al amado al tiempo que él o ella le contempla. Mírense suavemente a los ojos. No tiene que centrarse en ellos, deje que su visión sea periférica.

De este modo se sentirán juntos. Al principio, puede resultar difícil no reírse o hacer el tonto, pero si eso ocurre, vuelvan a la contemplación tranquila y deliberada. Enfoque sus pensamientos en la intimidad y la paz de la experiencia.

Puede notar, después de un rato, que en la visión desenfocada, la cara de su pareja comienza a distorsionarse. No deje que esto le distraiga: ignórelo, e intente volver a la tranquilidad que tenía antes.

CONTEMPLARSE Y RESPIRAR

Combinar la contemplación con la respiración puede ser muy satisfactorio. Muchos amantes descubren que, además de aumentar la intimidad después del coito, contemplarse mientras están tumbados en la cama durante unos diez o quince minutos antes de hacer el amor, tambien les relaja y les excita.

Dado que la experiencia de meditación de cada uno es diferente, resulta difícil saber cómo funcionará con usted y su amante. Pero para muchas personas, la calma y la relajación les provoca deseos y pensamientos más profundo que, de otro modo, no tomarían forma en sus mentes.